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"Camina el autor": itinerancia, agencia, y matriz cultural. Una lectura de Nueva corónica y buen gobierno (1615) de Guaman Poma de Ayala y los testimonios contemporáneos de Edilberto Jiménez Quispe. Betina Sandra Campuzano

Betina Campusano acaba de publicar este artículo sobre "camina el autor: de  Guaman Poma  y los retablos Edilberto Jimenez Quispe en la revista Telar enero-julio/ 2025 del Instituto Interdisciplinario de Estudios Latinoamericanos (IIELA). Bienvenida  y necesaria lectura.Un


) “Camina el autor: itinerancia, agencia
y matriz cultural. Una lectura de
Nueva corónica y buen gobierno (1615)
de Guaman Poma de Ayala y los testimonios contemporáneos de Edilberto Jiménez Quispe

Betina Sandra Campuzano

Universidad Nacional de Salta

Resumen:
 La crítica literaria latinoamericana ha señalado que el intenso acápite “Camina el autor” de Nueva corónica y buen gobierno (1615) de Guaman Poma de Ayala resulta el texto fundador del discurso y el sujeto migrantes. Sujeto migrante que es, además, performativo y traductor de imaginarios andinos. Sin perder de vista la copiosa bibliografía que aborda la producción de un indio bilingüe que, perteneciendo a los mitimaes, cumplía funciones dentro del esquema colonial, pretendo revisitar y repreguntar, en esta ocasión, acerca de algunas líneas trazadas en los textos lingüísticos e icónicos referidas a las agencias, las itinerancias y las matrices culturales andinas.
Me interesa detenerme en tres cuestiones: primero, frente a las pretensiones regulatorias que procuran homogeneizar el discurso colonial, me ocuparé de sus heterogeneidades a través de la problematización de la agencia y la autoría en los Andes del siglo XVII. En segundo lugar, me importa inventariar algunas figuras, imágenes y metáforas de estos sujetos (escribanos, fiscales, médicos, arrieros, entre otras) que se desplazan itinerantes por los Andes. Ello me permite problematizar la idea de un discurso fundacional para avanzar, más bien, a la propuesta del discurso inaugural de un archivo de migrantes andinos. Finalmente, me interesa rastrear las matrices culturales que subyacen en las crónicas y los testimonios contemporáneos del retablista Edilberto Jiménez Quispe, que se inscribe en la tradición de Guaman Poma.
Palabras clave: itinerancia, discurso inaugural, sujeto y autor, agencia, Andes


A modo de presentación

Alrededor de Nueva corónica y Buen Gobierno (1615), de Guaman Poma de Ayala, existen algunos consensos por parte de la crítica especializada (Pease: 2008): se trata de una crónica andina escrita por un indio “ladino” y bilingüe, que no era un mestizo en lo étnico, pero sí en lo cultural; una crónica escrita, de acuerdo con lo expresado por el mismo autor, a los ochenta años —lo que remite a la idea del anciano respetable y sabio—, luego de transitar un largo viaje en el que comprobó que el mundo estaba “al revés”; una crónica dirigida al rey de España, datada en Huamanga, en el contexto de las guerras civiles en los Andes y del movimiento Taki Oncoy; una crónica que narra alternando dibujos y relatos verbales, imaginarios andinos y enciclopedias occidentales, sintaxis española y quechua; una crónica presentada en la corte virreinal de Lima, que permaneció en el olvido hasta su hallazgo por el historiador Richard Pietschman, en 1908, en la Biblioteca Real de Copenhague, en Dinamarca; una crónica cuya edición facsimilar se publica en 1936, a cargo de Paul Rivet. Estos son algunos de los acuerdos más destacados en torno a una crónica que transita por distintos circuitos. También, podemos advertir que este singular texto —tan híbrido genéricamente como lo es su autor bicultural— resulta un notorio ejemplo de cómo la construcción del archivo colonial en este continente es siempre heterogéneo, incompleto, horadado y provisorio.
Bien sabemos, además, que la Conquista y la Colonia no son procesos ni discursos uniformes histórica ni discursivamente; al contrario, están signados por una multiplicidad de actores, voces y posiciones que responden a diferentes intereses, procesos, temporalidades y geolocalizaciones. Por ello, este heteróclito archivo involucra un amplio abanico de campos de conocimiento, géneros discursivos y propósitos de escritura que, al igual que el propio Guaman Poma de Ayala, se desplazan por diversos universos sociodiscursivos. Nueva corónica... resulta, pues, un exponente de estas traslaciones: entre la carta, la crónica, la biografía, la hagiografía y el texto icónico, la crónica andina se mueve entre diferentes géneros discursivos e intencionalidades comunicativas. Otro tanto sucede con los diversos roles que su autor configura durante el itinerario: Guaman Poma es, al mismo tiempo, príncipe, viajero, historiador, cristiano, moralizador, dibujante, intérprete y traductor. Y asimismo pasa con los múltiples destinatarios que el texto construye: el rey, las autoridades, los lectores eruditos, los indios hispanizados, por ejemplo. Sin duda, el hallazgo de Nueva corónica... reordenó el archivo colonial estableciendo no solo nuevas formas de organización del corpus, sino también introduciendo novedosas temáticas y problemáticas en los estudios coloniales.
A este marco, podemos añadir la preocupación de la crítica literaria latinoamericana por reinterpretar las identificaciones quebradas y heterodoxas, como suceden con los migrantes, que cuestionan aquellas concepciones identitarias compactas como el mestizaje, el hispanismo e, incluso, el mismo indigenismo. Éstas construyen, de acuerdo con las sospechas de Cornejo Polar (1995), un falso problema que no da cuenta de las heterogeneidades que conforman las sociedades continentales. Tal vez, por ello, resulta significativo cómo la misma crítica (Cornejo Polar: 1996; Bueno Chávez: 2004) señala que el intenso acápite “Camina el autor” de Nueva corónica... resulta “el texto fundador del discurso y el sujeto migrantes” (2004: 43). Sujeto migrante (Cornejo Polar: 1996) que, además, podemos añadir, es un sujeto performativo y un traductor de culturas, pues, al tiempo que anda, sabe y traduce imaginarios. A partir de estos postulados, y sin perder de vista la copiosa bibliografía (López Baralt: 1982, Adorno: 1991 y 1992, Husson: 1996, Pease en Guaman Poma: 2008, Mamani Macedo: 2016, Cortés y Zamora: 2016) referida a la singular producción de un indio bilingüe que, perteneciendo a los mitimaes, cumplía sus funciones dentro del esquema colonial, pretendo revisitar y repreguntar acerca de algunos ejes que se esbozan en los textos verbales e icónicos de esta crónica: las agencias, las itinerancias y las matrices culturales.
Para ello, en primer lugar, frente a las pretensiones regulatorias que procuran homogeneizar el discurso colonial, procuro ocuparme de sus heterogeneidades a través de la problematización de la agencia y la autoría en los Andes del siglo XVII que, como adelanté, dan cuenta de la biculturalidad, la performatividad y la traducción de un indio bilingüe. Luego, me interesa rastrear e inventariar en la obra del cronista las figuras de aquellos sujetos —los escribanos, los correos o chasquis, los visitadores, los traductores, los médicos o callahuayas, y los arrieros, entre otras— que se desplazan por los Andes coloniales.
Este inventario de itinerantes que transitan por la Nueva corónica... me permite disputar el sentido propuesto por la crítica literaria acerca de considerar esta crónica como un “discurso fundacional”, para entenderla, más bien, en términos de un “discurso inaugural” del archivo de migrantes andinos. Ello porque lo fundacional remite a visiones de corte más bien esencialistas que se asocian a las búsquedas del origen o a identidades replegadas sobre sí mismas, mientras lo inaugural lo hace a la genealogía, en el sentido que propone Foucault (1992), es decir, a lo meticuloso y lo azaroso del comienzo. Entiendo que lo inaugural puede remitir entonces a la construcción de un archivo siempre poroso y provisorio que es plausible de ser reorganizado, en este caso, por el relevamiento de las figuras de diferentes actores coloniales itinerantes y migrantes.
Finalmente, entiendo que estos sujetos que andan, saben y traducen imaginarios andinos, que son recogidos en el trazo y el relato verbal de la Nueva corónica..., y que inauguran de este modo un archivo de migrantes, conforman una matriz cultural (Campuzano: 2025) que se proyecta, se reproduce y se resignifica en textos contemporáneos como resultan los testimonios de la violencia política o las crónicas sobre la pandemia. Éstos son los casos de Chungui. Violencia y trazos de memoria (2005) y Nuevo coronavirus y buen gobierno. Memorias de la pandemia de COVID-19 en Perú (2021), de Edilberto Jiménez Quispe, que en el siglo XXI actualizan estrategias y significados de la crónica de Guaman Poma para hablar de las migraciones, las violencias, los dolores, los gobiernos y las denuncias del tiempo reciente.

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