El jueves 21 de este mes, se celebra el Día Mundial del Agua y como todas las celebraciones que tienen que ver con los bienes de la naturaleza, sobre todo agua y biodiversidad, más que un día de celebración debe ser un día de reflexión, de mea culpa, de arrepentimientos, de cambios y transformaciones en la mentalidad y la conducta humana con relación a la Madre Naturaleza. Porque mientras nos preparamos a celebrar ese día, los organismos mundiales han declarado en estado de alarma la situación del planeta Tierra, señalando que las cuatro mayores amenazas que se ciernen sobre nuestro hogar terrestre y la especie humana son los eventos climáticos extremos,...
Poéticas indígenas y originarias.